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Cuando termina nuestro contrato laboral, ya sea por despido o por expiración del tiempo acordado, como trabajadores tenemos ciertos derechos, entre ellos, el derecho a recibir el finiquito. Pero, ¿qué es exactamente el finiquito? En este artículo, responderemos a esta y otras preguntas relacionadas.
¿Qué es el finiquito?
El finiquito o liquidación es un conjunto de cantidades económicas que el empleador debe pagar al trabajador en el momento en que se finaliza el contrato laboral. Este pago se detalla en el “documento de saldo y liquidación”, que el empleador debe proporcionar al trabajador con al menos 15 días de anticipación en la mayoría de los casos.
Esta figura está regulada en el artículo 3 del Estatuto de los Trabajadores, que establece las fuentes de la relación laboral, así como en el artículo 49, que se refiere a la finalización del contrato. Además, los detalles específicos sobre el finiquito pueden ser especificados en el convenio colectivo que rige la relación laboral entre el empleador y el trabajador.
¿Qué se paga en el finiquito?
Es importante destacar que el finiquito laboral y la indemnización por despido no son lo mismo.
Cualquier trabajador que finalice su relación laboral con la empresa tiene derecho a recibir el finiquito correspondiente, ya que es un importe que la empresa le debe. Sin embargo, en caso de que se produzca un despido disciplinario o si el contrato finaliza, el trabajador no tendrá derecho a recibir indemnización alguna.
Ahora bien, es importante conocer los diferentes conceptos que se incluyen en el finiquito laboral. Estos son:
- Salario correspondiente a los días trabajados del mes en curso que no hayan sido abonados anteriormente. En caso de que existan salarios pendientes de meses anteriores, también deben ser incluidos.
- Horas extraordinarias que no hayan sido remuneradas.
- Parte proporcional de las pagas extraordinarias no percibidas por el trabajador.
- Días de vacaciones no disfrutados, que se calculan en función del tiempo trabajado durante el año. Este cálculo se realiza siguiendo lo dispuesto en el artículo 38 del Estatuto de los Trabajadores o en el convenio colectivo aplicable.
- Cualquier otro concepto que haya sido generado durante el desempeño del trabajador en su puesto y que no haya sido remunerado.
Es importante mencionar que si el trabajador adeuda algún importe a la empresa, este será descontado del finiquito laboral. Por ejemplo, en caso de adelantos de nómina solicitados. Además, el importe total está sujeto a las correspondientes cotizaciones a la Seguridad Social, que deben ser abonadas por el empleador en todos los casos.
Plazo para firmar el finiquito
Tal como mencionamos previamente, el importe correspondiente al finiquito laboral suele ser entregado junto con el preaviso del despido o la extinción del contrato, para ser abonado cuando la relación laboral llegue a su fin.
En función de las circunstancias, el trabajador podrá cobrar el finiquito de diferentes maneras:
- Junto con la indemnización en caso de despido por parte de la empresa.
- En un plazo razonable después de la fecha de baja voluntaria, si es que el trabajador ha decidido poner fin a la relación laboral.
- El último día de trabajo, si la extinción se produce al finalizar un contrato temporal.
Aunque el Estatuto de los Trabajadores no establece un plazo específico para firmar el finiquito, es importante tener en cuenta que el momento en que se proceda a la firma puede tener un impacto en el momento en que se reciba el pago correspondiente.
¿Qué sucede si hay conflicto por el importe del finiquito?
Calcular el importe del finiquito laboral es algo que todo trabajador debería hacer antes de firmar cualquier documento. Si no está de acuerdo con el importe que aparece reflejado, es de vital importancia que no lo firme. En lugar de eso, es recomendable contratar los servicios de un abogado laboralista y presentar una papeleta de conciliación en el Juzgado de lo Social correspondiente.
Solo en casos de fin de relación laboral conflictiva, aconsejamos firmar “en disconformidad”. Esto permitirá al trabajador cobrar el importe y mantener abierta la posibilidad de hacer una reclamación en el futuro.
No obstante, es importante tener en cuenta que el finiquito tiene un carácter liberatorio, lo que significa que su abono es prueba de la extinción del contrato de trabajo. A pesar de ello, el empleado dispondrá de un año para realizar cualquier reclamación que considere necesaria ante la justicia.
¿Dudas? mejor contacta con un abogado laboralista
Después de conocer los elementos del finiquito laboral y su impacto, es recomendable buscar asesoramiento especializado al momento de ser despedido, renunciar voluntariamente o experimentar la finalización del contrato de trabajo por otras razones. En este sentido, es fundamental buscar la ayuda de un abogado laboralista, quien puede garantizar la protección de nuestros derechos. En definitiva, es aconsejable no vacilar en contactar con un especialista para obtener el mejor consejo y asistencia posible.